Go Back Atrás

“No solo hay que enseñar a escuchar, hay que ir acompañando el proceso con la adquisición lingüística”

Entrevista con expertos

Segunda parte de la conversación con Helena Arroyo Moratilla, coordinadora del equipo de Logopedia para Implantes Cocleares del Hospital Universitario La Paz de Madrid.

¿Qué tipo de material utiliza?

Tanto los materiales que nos proporcionan las casas comerciales* -a nivel de percepción y estimulación auditiva- como materiales que elaboramos nosotros según las necesidades individuales de cada niño. Y usamos también juguetes del entorno, juegos que sepamos que les interesan especialmente.

¿Usan protocolos?

Sí, son muy útiles para ayudarnos en la consecución de objetivos. Las familias los van completando porque nosotros tenemos un campo de actuación relativamente cerrado, cuando los niños vienen a nuestro tratamiento dos, tres o cuatro días por semana durante 45 minutos. La mayoría de la información auditiva la tiene la familia. Junto al material que podamos preparar y utilizar, pedimos que la familia complete protocolos de audición en el hogar, de sonidos cotidianas, de habilidades auditivas y comunicativas que, para nosotros, son difíciles de ver.

¿Puede poner un ejemplo?

Nosotros, por ejemplo, no podemos saber cómo es la interacción de manera cotidiana con abuelos, primos, o sus amigos del colegio. Por eso les hacemos preguntas del tipo “¿parece que el niño sigue una conversación entre adultos?”, o “¿responde a voces de personas conocidas cuando está entretenido en alguna actividad en casa?” Esto nos ayuda a conocer más que lo que vemos en las sesiones de tratamiento. La familia también nos puede dar información que nosotros desconocemos y que nos pueden ayudar a entender una bajada del rendimiento en el tratamiento logopédico: por ejemplo, que un abuelito con el que tiene mucho vínculo ha fallecido, o si su hermano mayor con el que se lleva muy bien está de campamento una semana entera. Los niños son sensibles a cosas que ni nos imaginamos, y los padres son los que conocen toda la información sobre su hijo. Por eso tenemos que ser un equipo entre nosotros.

¿Qué papel tiene el colegio?

En una unidad de implantes cocleares de un hospital con tanta trayectoria, los logopedas recogemos la información de la familia y los diferentes profesionales alrededor del niño y la unificamos para que todos podamos utilizarla a la vez y la transmitimos a los servicios de otorrinolaringología, que van haciendo revisiones para el bienestar del pequeño. En el entorno escolar, aunque nos coordinamos con colegios y Equipos de orientación educativa constantemente, nuestro principal vínculo es con el EOEP Específico de Deficiencia Auditiva, que nos proporciona información de todo el proceso educativo que acompaña a los niños, evaluaciones, procesos de apoyo terapéutico etc. Además, son los principales referentes en lo que se refiere a la adaptación de FM para la escuela en caso de que lo consideren necesario.

¿Y cómo ayudan los centros de atención temprana?

Es un estamento diferente a Educación y Sanidad y son fundamentales en niños menores de seis años. Cuentan con estimuladores, fisioterapeutas y psicólogos que trabajan en diferentes áreas pero que se integran con nosotros en el equipo multidisciplinar.

¿Qué diferencia existe entre una rehabilitación a un adulto con respecto a un niño?

La principal es que, en la rehabilitación del niño, la gran mayoría de veces tienes que implicar la parte auditiva con la de adquisición lingüística, por lo que el trabajo consiste no solo en ganar capacidades a nivel auditivo. Además, tienes que conseguir integrar esa información auditiva en la adquisición que vaya haciendo el niño del lenguaje del día a día. El objetivo es que el niño llegue a utilizar el lenguaje oral de manera funcional, de manera que le permita relacionarse con su entorno.

¿Y en el adulto?

Es diferente, porque nos quedamos en la parte auditiva: partimos de la base de que ya ha adquirido un lenguaje. No solo eso: el adulto más joven que nos podemos encontrar lleva 18 años utilizando el lenguaje oral. Si nos encontramos con un adulto al que hay que rehabilitar, nos basamos más en la parte de percepción auditiva y se trabaja en conseguir el máximo potencial auditivo a través de sus implantes cocleares.

¿Y a nivel funcional?

La diferencia en tiempo es muy grande: con un adulto, el tiempo de trabajo puede ser de unos 6-9 meses para conseguir el máximo potencial con el implante. Con los niños, aunque dependerá mucho de las circunstancias de cada uno, se pueden llegar a realizar tratamientos con duraciones de hasta 2 y 3 años.

Lo que sí es una similitud en el trabajo con ambas poblaciones es la gran importancia que tiene la familia en la (re) habilitación logopédica que se lleve a cabo con los pacientes

¿Es posible la rehabilitación a distancia?

Es útil en el caso de que el niño no se pueda trasladar por algún motivo. Pero son muy heterogéneos y suele ser difícil llevarlo a cabo, aunque la telemedicina siempre va a permitir lograr algún avance. Con los adultos, es un enorme avance, pese a que cada uno tiene sus características. Pero nos puede ayudar mucho con el paciente estándar adulto, con una buena implicación, una buena adherencia al tratamiento y que quiere realmente mejorar con sus implantes y conseguir una buena adquisición de potencial auditivo por medio de estos implantes.

¿Quiere leer la primera parte de esta conversación?

*Enlace a material de rehabilitación de MED-EL con descargas gratuitas

Descarga de materiales de rehabilitación (medel.com)

 

Regístrese para recibir nuevas actualizaciones

Al suscribirse a nuestro boletín podrá mantenerse actualizado sobre las mejores prácticas en tecnología de implantes auditivos.